Pintura de José Gutiérrez Solana |
Un hombre
respira espantado
un aire oscuro
lleno de muerte,
de miserias entre muros derrumbados,
entre gritos
silenciados vilmente.
Y a su lado
lloran los niños.
El corazón de
aquel hombre no entiende
los gritos
desgarrados de la gente,
el ruido de la
bombas que al caer
destrozan la
vida salida del vientre,
y sepultan los
sueños vividos al nacer.
Y a su lado lloran los niños.
Quiere correr,
desaparecer, pero no puede,
quiere llorar,
y se desespera por no encontrar lágrimas
para sus ojos cerrados
que no quieren ver las desgracias
de la guerra
que mata la vida de tantos inocentes.
Y a su lado
lloran los niños.
Temblando
espera que pronto llegue la muerte
y lo libere de
los llantos que no volverán a sangrar,
porque cree que
ha muerto indiferente
por no haber
creído en los que luchaban por la libertad,
porque ya no oye
como lloran los niños
de todas las
guerras ganadas y perdidas a la par.
Y a su lado ya
no lloran los niños.
Enlace:
https://www.youtube.com/watch?v=zElVaBgLe2w
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