La Oruga Azul.

La Oruga Azul.
La oruga se puso azul turquesa, porque presa de la luz de la poesía, reposa en las cuartillas de la mesa impregnada de tinta y fantasía… (Antonio Peláez Torres),

viernes, 16 de febrero de 2024

Reseña al poemario "Cosmogonía del Caos", por Antonio Rafael Parrilla Muñoz


Revista Ahorateleo
Editada en Guadix, Granada por Asociación para la Promoción de la Cultura y el Arte "La Oruga Azul"
ISSN  2952-5721





He tenido la gran suerte de poder leer el poemario de Carmen Hernández Montalbán, titulado Cosmogonía del Caos. Solo deciros la positiva y grata satisfacción que he experimentado tras su lectura; la recomiendo.  Pido disculpas si me paso en extensión al hacer el comentario que seguidamente os dejo; pero es debido a mi actual situación de estudiante en primer grado de la Filosofía, y también mi gran amor hacia la poesía en verso o en prosa.

 

“Mira esa galaxia, es un haz de polvo, partículas o planetas en suspensión, un mundo minúsculo, sorprendido accidentalmente por la luz.

¿Es la luz, acaso, la clave de todo?”

 

El dicho antiguo decía. - “la buena esencia se presenta en frasco pequeño”, también las esmeraldas o los diamantes suelen tener gran valor…, algo así sucede con este trabajo creativo de nuestra paisana Carmen Hernández Montalbán Cosmogonía del Caos: que la autora            nos presenta, en forma de poemario; unos versos cortos, como dardos, con un contenido filosófico unas veces; otras como denuncia o desgarrador grito de repulsa hacia el actual deterioro al que se enfrenta el ser humano, producto, como bien nos muestra Carmen, la autora, del desvío o estancamiento de nuestra sociedad. Cada verso que nos presenta Carmen, en sus tres partes fundamentales: a saber. - La Razón, parafraseando al filósofo Descartes, “Cogito ergo sum”; La Virtud, la referencia a la Naturaleza y una parte de ella, el hombre; sobre este asunto el gran maestro Aristóteles en su libro Ética a Nicómaco hace referencia a los fantásticos y bellos versos empleados por nuestra poetisa accitana; - La Acción, la Voluntad humana, “Alea iacta es”, dicho por Julio Cesar y creador de la Julia Gemela (legión bajo su mando). Estos versos de Carmen, repito: representan una preciosa selección de gemas valiosas para leer y releer; para estudiar su profundo contenido y en definitiva filosofar con ellas y una por una…, sobre todos para entonar el “mea culpa” puesto que no tienen desperdicio…” Lo que un día se nos dio como regalo y que tratamos con tanto desprecio…Quién nos salvará de este fracaso?"

¡Colosal!, Carmen, ¡magnifico! y ¡colosal poemario!

 

El poemario de Carmen ha marcado un antes y un después en su vida de escritora; también ha incidido, ya, y para siempre, en la vida cultural y poética accitana. Ha puesto en ebullición a nuestra querida ciudad de Guadix impidiendo su entrada en el letargo y la tediosa monotonía. Nuestra poetisa ha abierto de par en par una ventana, mirando por ella hacia el conocimiento universal; conexionado la Julia Gemela Acci, a través de ella, con nuestra cercana Elvira.

No se trata de un libro más; se trata de un libro genuino y muy original

En lo filosófico las teorías Kantianas; han puesto en ebullición y actualizado el amor por la ciencia y la Filosofía. - Carmen, nuestra poetisa, ha dado pasos, con sus versos, a la energía, para que fluya de inmediato; para todo el que lea su libro, “despacito y con amor”.

Pienso que, la tierra y en el caso que nos ocupa; nuestra arcilla de Guadix; depositada durante millones de años en el lecho marino y en las entrañas de este mar interior; ha prestado unas características especiales a sus habitantes

He leído su libro con atención, despacio y con amor…, y fruto de algunas reflexiones; me he preguntado ¿si Odiseo sufrió tanto o más a la llegada a su adorada Ítaca?, que cuando ¿luchó en Troya? o ¿posteriormente cuando vagó por la mar océano?

La tierra y en el caso que nos ocupa; nuestra arcilla, depositada en millones de años en el fondo de un mar interior, origen de nuestro Guadix; ha prestado unas características especiales a sus habitantes y Carmen, nuestra querida poetisa, al parecer, ha recibido una buena dosis de esa arcilla creadora y se ha contagiado del duende que habita en sus entrañas.

 

EPILOGO:

Cosmogonía del Caos es un libro de sabiduría que, al igual que, el libro Los elementos de Euclides aunque se perdiese su original, con el paso de los años…, empapará todas las mentes de aquellos que tengan la suerte de leer sus versos y reflexiones; inundando sus mentes. Es una alerta al ser humano sobre el juego peligroso que, actualmente nos sitúa a la deriva y al margen de la Naturaleza.

 

Entrevista a Dori Hernández Montalbán, autora de "Sobrevivir en la fragilidad".

 


Revista Ahorateleo
Editada en Guadix, Granada por Asociación para la Promoción de la Cultura y el Arte "La Oruga Azul"
ISSN  2952-5721





Háblanos un poco de ti.

Esta pregunta tiene un amplio campo para responder…, pero me atengo al momento en que se formula que es con motivo de la publicación de mi libro: Sobrevivir en la fragilidad, se podría decir que soy una mujer con inquietudes artísticas, alguien que aspira a seguir  creciendo no sólo en el aspecto artístico-poético sino como ser humano. Una persona  que cree más en los hechos que en las buenas razones. Me gusta la utopía porque me ayuda a caminar. No soporto la injusticia ni el abuso de poder. Supongo que venimos al mundo por y para algo, y en mi caso estoy segura que no vine a pilotar aviones – risas-.

 

¿Qué podemos encontrar entre las páginas de Sobrevivir en la fragilidad?

Cada lector encontrará algo distinto. Los libros no los escribe únicamente el autor o la autora, sino el lector de manera figurada, al leerlo lo transforma al darle un nuevo significado.

El título ya es bastante sugerente ¿Qué somos sino supervivientes? La acción misma de escribir es un acto de supervivencia y de resistencia ante las situaciones y circunstancias. Al menos en esta ocasión así me lo propuse porque la mirada se despliega tanto en derredor como hacia el interior de la voz poética, en éste sentido.

Vamos a encontrar “prosemas”, un valiente ejercicio  del poema largo y no porque ese haya sido mi propósito, sino que la escritura ha ido derivando en ello. Un firme deseo de plasmar la belleza a través del lenguaje…

Aunque únicamente se hubiera conseguido una especie de manual de supervivencia poético ya hubiera merecido la pena. Un intento al menos de nombrar el mundo, la belleza. También hay verdad, honestidad.

 

¿En qué ingrediente reside la fuerza de este libro?

Una de las características o propósito que me resulta más interesante es la indagación, la introspección que la voz poética realiza sobre la fragilidad, al reconocerse un ser frágil, vulnerable y el firme convencimiento de que el lenguaje no basta para explicarse y explicar la vida y la belleza que en ella reside. Y aún siendo así no darnos por vencidos.

Algún lector ha encontrado también ecos de –la rosa- juanramoniana.

Al fin y al cabo el lenguaje es un invento, una cualidad del ser humano para comunicar la emoción que es lo que lo distingue de los demás animales.

 

¿Cómo describirías tu trayectoria de escritor desde la primera publicación hasta la última?

Una trayectoria quebrada, discontinua, desigual…, -risas-comencé a escribir en la adolescencia. La escritura fue antes que mis intereses por la interpretación, antes que el teatro, la pintura, etc. Pero publiqué ya tarde, cuentos, relatos y después Cuaderno de los iceberg; un poemario más en sintonía con el aforismo. Después Los sueños del náufrago, relatos y prosa poética. Soy una poeta más bien lenta en cuanto a presentar trabajos. Pero el silencio también es un lenguaje y los mudos también se expresan ¿no?

 

¿Cuál fue el último libro que leíste? ¿Por qué lo elegiste?

Mañana y tarde de Jon Fosse. Lo elegí porque es un autor que también es dramaturgo, Premio Nobel de literatura 2023 y me interesa mucho como autor teatral, poeta y novelista.

 

¿Y ahora qué? ¿Algún nuevo proyecto?

Ahora lo más inmediato es recuperarme de mi fractura de tobillo, –risas- siembre tengo un nuevo proyecto en mente,  en mi caso varios y de variada índole artística. Pero los proyectos son eso, castillos en el aire, al menos hasta que se hacen reales.

Muchas gracias.

domingo, 11 de febrero de 2024

Los avatares de las piedras, por Carmen Hernández Montalbán.

 


Revista Ahorateleo
Editada en Guadix, Granada por Asociación para la Promoción de la Cultura y el Arte "La Oruga Azul"
ISSN  2952-5721

Hacía mucho tiempo que no leía un poemario tan innovador en su estructura como Alguien lleva una piedra escondida en la ropa del poeta José Carlos Rosales. Aunque el poemario está dividido en dos partes formalmente diferenciadas tiene una estructura subyacente peculiar. Los poemas tienen una cadencia relajante como la lluvia mansa: como esa lluvia persistente que ha transformado el paisaje o atmósfera de esos transeúntes que habitan una de las tres dimensiones simbólicas del libro. Los versos han ido recalando en mí como el agua de esa lluvia; una lluvia que puede ser cualquier acontecimiento que pone nuestro mundo patas arriba; un suceso del que es imposible escapar y que nos transforma para siempre. Esa lluvia nos avisa de que ya nada será igual: “…La soledad del mundo contenida en un ángulo, / todo está enrarecido, todo está enrareciéndose…” - O nos arrastra: “… pero la lluvia vino removiéndolo todo, / y desbordó las lindes, / inundó dormitorios, comercios y trastiendas…” o nos salpica, nos deshace: “… el barrio entero se volvió una pócima, / un barrizal, un charco, / una marisma turbia alejada del mar, / el lodazal estúpido donde el mundo se hunde…” -o nos desampara: “Calló la tarde y calló la confianza / en encontrar un sitio seco, / la casa prometida, / hueco sin lodo, tierra amable…”

Todos tenemos una piedra escondida en la ropa. La piedra y su sentido metafórico es otra cara de esta obra poliédrica. La piedra como pesado lastre que arrastramos y que no nos permite avanzar: un sentimiento de culpa, un trauma personal… “Las piedras pesan lo que pesa el mundo, / un peso impertinente si lo arrastras contigo…”, o las piedras como único elemento perdurable que nos cuentan su historia o la historia del mundo… “Parecen iguales, pero son diferentes / como son diferentes las nubes y los pájaros: / cada piedra contiene una historia, un origen, / la erosión del camino que las trajo hasta aquí.”. La piedra es también la soledad más absoluta; la soledad de las piedras; la que siente alguien que se vuelve invisible para los demás “… Una piedra está sola aunque esté acompañada / por otras que también vivirán solas, / tan solas como aquella / donde late la vida o el caos: / toda piedra está sola desde siempre.”

La familia es la tercera cara en la que se asienta la estructura del libro. Una familia que parece guardar un secreto o que calla una realidad que los hace sufrir, todos representan su roll en esta existencia impostada o insostenible. Cada miembro de la familia tiene una piedra metida en su zapato o representa a una piedra diferente.

 

Hijo Mayor finge que tal problema no existe, siente el deseo de cambio pero se ha quedado en su zona de corfort. La planta de su pie se ha adaptado a la piedra: “Hijo Mayor no sabe lo que pasa / o simula, más bien, que nada sabe / de lo que está pasando, nunca pudo / devanar la madeja donde estaba, / durante tanto tiempo cobijado / el afán de vivir en otro mundo.”

La Madre o la casa, la soledad y el abandono. La madre se lamenta cuando todos parecen dormir. Es un grito silencioso en mitad de la noche. La madre es la piedra ignorada: “Madre pasó la noche lamentándose: / un susurro borroso,  una queja, un gemido, / el dolor que desgarra su rodilla, / la soledad de quien no tuvo nunca / compañero que le ofreciera un hombro / para apoyar la mano, no caer”. La madre representa los cimientos de la casa, unos cimientos que tiemblan.

El Padre parece ser el origen del problema. Un padre que nunca lo fue, que nunca estuvo en el lugar que debería estar. Un padre ausente, que causa tanto vacío como  inquietud o miedo: “Padre se fue, no está, solo queda una sombra, / sólo un hueco: su ropa que envejece / arrinconada en un armario antiguo, / y el temor de que vuelva de improviso, / el eco de sus llaves, la ignorancia”. Padre es el hueco de la piedra.

El Hijo Menor no haya respuesta. Abrumado por una situación que le sobrepasa, se cobija, se aísla, se abstrae, construye un muro invisible con la realidad. El hijo es piedra minúscula, polvo: “Hijo menor se esconde / detrás de una butaca polvorienta de mimbre, / se ha vuelto sordo y la sordera / lo ha convertido en piedra inane / montículo de arena, viento inerte.”

Hija Mayor sueña, se ampara en la idea de que otro mundo es posible. Pone mentalmente en orden un mundo emocionalmente desbaratado. Hija mayor amasa la esperanza de una vida amable: “Hija Mayor dibuja, cada noche, / con tinta de colores, casas árboles, / parajes donde el mundo vive en orden…” Hija Mayor es la piedra tirada al estanque.

Estas tres dimensiones, aparentemente independientes están conectadas de principio a fin. En cada una de ellas existen resonancias de las otras y a veces se funden. Alguien lleva una piedra escondida en la ropa es una propuesta poética singular de la que no salimos indemnes y oficia de espejo de la vida, del torrente de la vida y la existencia, de la naturaleza humana y sus contradicciones. Sirva como colofón el poema final:

“No estar en lo que había: estar en lo que hubo / olvidando que allí tampoco estabas tú. / Y estar sin que lo sepan aquellos que no quieren / saber dónde se guarda lo que nunca se guarda. / Volver sin haber ido, llegar sin que se note: / otra cosa no veo, no añadiré más.“

lunes, 22 de enero de 2024

BASES III CERTAMEN ÁRBOLES 2024




Se convoca III Certamen público para escolares y jóvenes de la comarca de Guadix sobre la siguiente temática: ÁRBOLES, AGRICULTURA o MEDIO AMBIENTE 

La convocatoria contempla tres técnicas y dos modalidades

Técnicas: Poesía, cuento o diseño

Modalidades: Escolares de 12-15 años, y

Jóvenes de 16-30 años.

Los trabajos en las técnicas de poesía, cuento o texto libre, podrán ser manuscritos en letra clara o impresa. 20 versos como máximo en poesía, y una cara de A4 para el cuento o texto libre.

Para el diseño se pueden utilizar distintas técnicas: dibujo, pintura, acuarela, fotografía, diseño digital, mixto, en tamaño A3.

En todos los trabajos habrá que hacer constar en la parte posterior:

Nombre y apellidos, edad, teléfono, con SMS o whatsapp. Centro educativo y vecindad.

Requisitos: Podrán presentarse a este certamen las personas comprendidas en las edades señaladas, siempre que vivan en Guadix y comarca.

Premios: Habrá Premios para los mejores trabajos con material de montaña, Multiaventura, libros, plantas, y alimentos de calidad de la comarca. Se premiarán los trabajos presentados más originales. 

Habrá obsequios para todos los participantes, y una invitación a una jornada de convivencia en el campo, con plantación de árboles o plantas.

Se organizará una exposición de los mejores trabajos.

Plazo de presentación hasta el 27 de Febrero de 2024, en la sede del Instituto, Escuela de Arte o Biblioteca de Guadix.

Todos los participantes aceptan las reglas de este certamen y la valoración del jurado.

Organiza: Asociación Co-marca Guadix Natural

Colaboran: La oruga azul y Centros educativos.

domingo, 10 de diciembre de 2023

AHORATELEO, revista literaria. Número 4. Diciembre de 2023.


Editado en Guadix, Granada 

por Asociación para la Promoción de la Cultura y el Arte "La Oruga Azul"

ISSN  2952-5721



SUMARIO


ENTREVISTAS:
















































 

Entrevista a Pepe Romero, autor de Eslabones rotos.


 

Háblanos un poco de ti.

Pues de mí puedo decir lo que siempre refiero: Idealista y soñador perenne, con cuerpo de hombre alma de niño y corazón de poeta. Vamos, con todas las papeletas, según los tiempos que corren, para estar en el bando de los eternos perdedores. No es que esté de bajón ni sea pesimista, solo me remito a una realidad fehaciente y palpable.

    

¿Qué podemos encontrar entre las páginas de Eslabones rotos?

 En las páginas de la novela, “Eslabones Rotos” Podemos encontrar: Amor y entrega incondicional de madre, retazos de vidas, alegres unas, tristes otras y nefastas algunas. Vamos, la ensalada misma que conforma la vida. Hay capítulos duros unos, alegres otros. Algunos, pienso que oscuros. Pero ante todo y sobre todo, he intentado profundizar en lo controvertido del alma humana, no sé si lo he conseguido, eso será el lector quien lo decida y juzgue.

 

¿En qué ingrediente reside la fuerza de este libro?

 Pienso que, ante todo, en la entrega y amor incondicional de una mujer y madre, que en definitiva es de donde irradian todas las demás vivencias y personajes. En primer lugar, la mujer, cuidando de su padre con dedicación y mimo, a pesar de lo difícil de la convivencia, y después, dándolo todo por su hijo, a pesar de tener que luchar con su propia conciencia, enfrentándose a la disyuntiva de tener que dirimir el feo asunto moral que le abofetea con saña.

 

¿Cómo describirías tu trayectoria de escritor desde la primera publicación hasta esta última?

Pienso, que siempre exponiendo la realidad misma sin aderezos ni flores. Mostrándola tal y como se nos presenta ante nuestros ojos

 

¿Cuál fue el último libro que leíste? ¿Por qué lo elegiste?

Bueno, el último, el poemario “Cosmogonía del caos” de Carmen Hernández Montalbán, una delicia para los sentidos. Y en cuanto a Narrativa, “El narrador de historias” de Harold Robbins; un libro que compré en Gijón en un mercadillo callejero. Yo ya había leído a este autor, pero la verdad es que me sorprendió gratamente este libro. En definitiva, el libro me costó solo un euro, pero el contenido me agradó bastante, creo que valió la pena.    

 

Y ahora qué, ¿algún nuevo proyecto?

 Si, hoy mismo acabo de ponerme en contacto que la Editorial, para iniciar la elaboración del nuevo proyecto que espero que no tarde mucho tiempo en salir del horno


Entrevista a Javier Gilabert, autor de Todavía el asombro.

 


Háblanos un poco de ti.

Para empezar, soy maestro; maestro avemariano (de las Escuelas del Ave María), felizmente casado y padre de dos hijos maravillosos. Y de unos años a esta parte, escribo poesía. Llegué al mundo poético de la mano de PoeAmario (Círculo Rojo, 2017), un proyecto que combinaba poesía y solidaridad, pero es En los estantes (Esdrújula Ediciones, 2019), el que considero mi primer poemario. Hasta llegar a Todavía el asombro (Ediciones del Gallo de Oro, 2023), con el que obtuve el Premio Blas de Otero-Ángela Figuera, han sido muchas las cosas hermosas que me ha traído esta disciplina, como publicar Bajo el signo del Cazador o Sonetos para el fin del mundo conocido a cuatro manos con Fernando Jaén y Diego Medina Poveda, respectivamente, coordinar antologías tales como la antología de textos contra la violencia machista Granada no se calla (Esdrújula, 2018), Versos al amor de la Lumbre (Revista Lumbre, 2020), Para decir amor, sencillamente (Diputación de Granada, 2023), un homenaje a Rafael Guillén, o La satisfacción del deber cumplido (Esdrújula, 2023), con motivo de la celebración del centenario de la muerte del Padre Manjón, fundador de las escuelas en las que desempeño mi labor docente. En estos años también he tenido la fortuna estar detrás de dos secciones de entrevistas en SecretOlivo.com, de colaborar con la revista musical Efe Eme, o de crear junto con Fernando Jaén y Gerardo Rodríguez Salas el Premio Nacional de Poesía “Ciudad de Churriana”, único en nuestro país que galardona a un libro publicado y a su editorial.

¿Qué podemos encontrar entre las páginas de Todavía el asombro?

Los lectores y las lectoras de Todavía el asombro se encontrarán, en primer lugar, un poema que sirve a la manera de mapa para guiarlos en su lectura. El poema, dividido en cuatro partes, da las claves de lectura de dichos capítulos. En cada uno de ellos hay trece poemas muy breves, a la manera de los epigramas clásicos -aunque no en el mismo tono- que con un lenguaje sencillo recogen una serie de reflexiones sobre la vida, también acerca de la escritura poética, pero sobre todo que pretenden poner en valor la importancia de lo que la vida nos da, de aquello que cotidianamente tenemos a nuestro alcance y que tan a menudo desdeñamos precisamente por eso. De una parte, es un compendio de la mirada; de otro, una suerte de “carpe diem”. Para cerrarlo, un soneto blanco hace las veces de Coda y termina remarcando aquello que pretende expresar el libro: “tan sólo es posesión la vida ahora”.

¿En qué ingrediente reside la fuerza de este libro?

Eso es algo que habrán de decidir sus lectores. En mi opinión, su aparente sencillez y la brevedad de sus poemas, pero con un mensaje claro y -al menos, eso espero- profundo. También en el ritmo de sus versos. He intentado que los poemas tengan su propia música.

¿Cómo describirías tu trayectoria de escritor desde la primera publicación hasta esta última?

Como comentaba anteriormente, han pasado cinco años desde que autoedité PoeAmario, por casualidad como quien dice, hasta Todavía el asombro. Afortunadamente, en este tiempo he tenido la enorme fortuna de conocer y aprender de grandísimos poetas como Juan Carlos Friebe o Rafael Guillén, por mencionar dos, aunque cuento entre mis amigos con muchas y muchos poetas de cuyos consejos aprendo a diario. Quiero creer que he hay una evolución en el decir y en el cómo decirlo en estos años.

Por otro lado, en todo este tiempo he tenido la suerte de conocer personas maravillosas, seres de luz con los que comparto prácticamente a diario vida y poesía. Sin duda, me quedo con eso.

¿Cuál fue el último libro que leíste? ¿Por qué lo elegiste?

Acostumbro a llevar varios libros adelante. Según el momento del día, leo narrativa o poesía, ensayo... Así pues, si os parece, citaré uno de cada. En narrativa, Martinete del Rey Sombra (Jeckyll & Jill, 2023), de Raúl Quinto. Lo elegí porque Raúl es un grandísimo escritor y porque la temática, el intento de genocidio del pueblo gitano en la España del rey Fernando VI y del Marqués de la Ensenada, me pareció muy interesante: desgraciadamente era un tema “borrado” de los libros de historia y Quinto nos acerca a esa realidad terrible con un libro preciosamente escrito; en poesía mencionaré 174517 [El corazón del pájaro] (Cenlit Ediciones, 2016) un poemario con el que Tomás Hernández obtuvo el Premio Ciudad de Pamplona y que nos acerca el testimonio en primera persona de los protagonistas de otro genocidio, el del pueblo judío a manos de los nazis. Sin duda, uno de los libros que más me han conmovido últimamente. Por último, mencionaré Seres de un día (La isla de Siltolá, 2017), del poeta cordobés Antonio Luis Ginés, un híbrido entre el ensayo y la prosa poética que incide en la reflexión de la propia producción poética. Recomiendo encarecidamente a quien lea estas líneas que se haga con ellos: los disfrutará.

Y ahora qué, ¿algún nuevo proyecto?

“Proyecto” es mi segundo nombre [risas]. Desde que llegué al mundillo literario no he parado de poner en marcha proyectos que me han parecido interesantes por diversos motivos (como fue el caso de Granada no se calla (Esdrújula, 2018), una antología de textos contra la violencia machista). En esta inercia he tenido la fortuna de hacer equipo estable con mis queridos Fernando Jaén y Gerardo Rodríguez Salas y con ellos estoy preparando ya la tercera edición del Premio Nacional de Poesía “Ciudad de Churriana” que coordinamos conjuntamente, y la segunda de “Vega Poética”, el festival de poesía que va aparejado a dicho Premio. También hay en marcha otros proyectos corales, y en distintas fases. Pronto podré contar más sobre alguno de ellos. En lo estrictamente personal, sigo leyendo y escribiendo, pero ahora toca darle a Todavía el asombro una vida digna. Quedan aún varias presentaciones por delante y me ilusiona muchísimo poder darlo a conocer a nuevas y nuevos lectores. Pero sin lugar a dudas, el proyecto más especial en el que estoy trabajando es la tercera edición de "La poesía es cosa de niños” una antología de poemas de mis alumnos de 4º de primaria que publico a final de curso (las dos anteriores pueden descargarse gratuitamente en mi web, www.javiergilabert.es).