Cuando muchos se marchen y todo se marchite
éste bancal quedará barbecho y desdichado,
estrecho de hierba baja, seco y encharcado,
cañaveral de enhiestos dedos buscando agua.
No habrá más mística que la aceituna molida
ni otra contradicción que la tierra desterrada
de su laborioso final y su génesis ultima,
óbito de muerte tras inmortalidad ganada.
El campo es una niño que llora mientra siega
la mies esparcida en gavillas de oro y viento
y el maíz macilento en macetas de barro a mano
moldeado a semejanza de la carne del humano.
Si tengo que esperar a que el campo desespere
si tengo que esperar que lo verde se marchite
seguiré sembrando en un océano de lodo
para que la tierra continúe su labor de envite.
El labrador, pobre e innecesario ya,
hollará la raíz cetrina y pura del subsuelo
para dejar enterrado al cabo, una papa,
esa simiente que de un tiempo en adelante
será escaso fruto de mortal labranza.
preciosa
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