viernes, 14 de noviembre de 2014

Su nombre, por ALICIA MARÍA EXPÓSITO.

 

Pintura de Michael Cheval

Apenas si recuerdo 
su nombre y su figura, 
el instante preciso 
en que dejó mi vida
 definitivamente.
Su rostro 
me aparece mutilado 
en el descolorido paraje 
del recuerdo.

He olvidado su nombre.
Pero su aroma no.
Su aroma fresco 
de mañana clara.
Buscábamos entonces 
arboledas perdidas, 
senderos escondidos 
para lucir los besos 
aún sin estrenar,
 juegos de adolescencia 
casi recién llegada.

¡Qué enorme es esta herida 
de inquietante ternura 
que subyuga un presente 
entristecido!

Hoy que me siento sola, 
que he corrido mil veces 
las esquinas del tiempo, 
hoy que todo parece 
más grande y más terrible, 
tengo el dolor pequeño 
de no poder sentir 
su nombre entre los labios; 
y la alegría 
de aquel beso a escondidas 
que me dejó en la boca
 un sabor agridulce 
de campo y de camino.

No hay comentarios:

Publicar un comentario